jueves, 17 de septiembre de 2009

Noche de viernes: Jane Eyre 1944

Después de toda la semana dejando caer, los dos, la pregunta de qué íbamos a ver el viernes por la noche sin encontrar respuesta, llegó el viernes y seguíamos sin haber dado con ella.

De repente, por la tarde, Manuel dijo que lo que le apetecía ver era Jane Eyre 1944 (me niego a llamarla Alma rebelde, que fue como tradujeron extrañamente el título - de la película, el libro se llamaba Juana Eyre - en España) y yo asentí, porque me apetecía verla y porque nos quitábamos un peso de encima (recuerdo que aún tenemos por ver joyas como la adaptación de Cumbres borrascosas de la MTV (sic), así que el alivio es comprensible, ¿no?). Probablemente sea la adaptación de Jane Eyre por excelencia y la primera que yo vi en una nuevecita cinta de VHS una mañana de Reyes de hace, ¿cuánto?, probablemente más de nueve años ya.

El caso es que cuando me puse a hacer memoria recordaba menos de lo que pensaba, así que verla no era una mala idea en absoluto. Lo que recordaba era que no terminaba de parecerse al libro. Y recordaba mal hasta eso.

Antes de empezar a verla Manuel me pidió que intentara verla como película, no como guión/adaptación (o sea: no pensando en las comas que faltan, vaya) y yo contuve la respiración en el principio, cuando se abren las páginas del libro y te leen un principio que no es el de la novela (cosa que me parece ridícula: si vas a sacar el libro, saca el libro de verdad y si no quieres empezar como empieza el libro búscate otra forma de comenzar). Pero luego, aunque siguen saliendo fragmentos inexistentes del libro a lo largo de toda la película, la cosa mejora considerablemente. La niñita que hace de Jane Eyre de pequeña (Peggy Ann Garner) es de las mejores que he visto, por ejemplo y aunque como en la mayoría de las adaptaciones su etapa pasa rápido como el viento, aquí se toman libertades varias (no del todo malas) y sale una jovencita, jovencita Elizabeth Taylor (¡la actriz en este caso!) haciendo de Helen Burns.

De repente Jane crece - mucho, porque Joan Fontaine tenía unos 26 años cuando interpretaba a una Jane de 18 - y deja a Brocklehurst tirado (eso está bien, aunque en el libro Brocklehurst recibe otro tipo de "castigo" en la película se agradece que Jane le dé por fin - y sólo figuradamente - una buena patada) y llega a Thornfield, donde los efectos góticos ya se disparan del todo y donde la niña que hace de Adèle es adorable (era Margaret O'Brien). Y por fin llega Orson Welles, con su enorme - en todos los sentidos - Rochester.

Por supuesto el final está ligeramente modificado, siempre en las adaptaciones de cine es difícil meter a los Rivers y darles un poco de sentido (se podría argumentar - y esto es como alabanza a Charlotte Brontë, no como queja - que St John Rivers, por más tiempo que se le dedique no tiene explicación posible, pero eso es otro tema). Y curioso el hecho de que aquí Rochester haya optado por quedarse a vivir en las ruinas de Thornfield, pero en fin, supongo que los decorados - quemados o no - hay que amortizarlos.

El caso es que nos sorprendió porque la recordábamos como buena película - esto más en el caso de Manuel, yo iba de oídas - y como adaptación tirando a mala y resultó no ser tan mala. Resultó ser tirando a buena, de hecho (Aldous Huxley estaba entre el equipo de guionistas). Claro que, como le dije a Manuel, es probable que haber visto tantísimas adaptaciones espantosas en los últimos meses nos haya hecho verla con otros ojos. Aun así, es cierto que mantiene mucho diálogo real del libro y que intenta pegarse a la novela todo cuanto puede y cuanto permite el tiempo y algunas ideas de los guionistas. Y, como decía Manuel, es probablemente la adaptación que más ha sabido potenciar el ambiente gótico de la novela que en otras queda muy en segundo plano - si es que no se pierde del todo - en favor del tono rosita de la historia de amor.

Lo curioso del caso es que vimos que, a propósito o por casualidad, eso ya no lo sé, hay muchas cosas de la última adaptación de Jane Eyre (la de Ruth Wilson y Toby Stephens de la BBC) tiene muchas cosas similares a esta, salvando las distancias (dicho lo de "salvando las distancias" sin insinuar nada malo hacia la última Jane Eyre, que es mi adaptación favorita).

Mención aparte se merece la banda sonora de Bernard Herrmann, que luego compondría una ópera de Cumbres borrascosas, señal de que una vez que llegas a las Brontë, vengas de donde vengas, es difícil separarse de ellas.

El caso es que ahora me queda por ver Rebecca, con Joan Fontaine haciendo prácticamente el mismo papel. Porque yo, al contrario que todo el mundo, resulta que leído la novela pero nunca he visto la película.

Y ya que estoy dejo aquí un graciosísimo cartel de las bibliotecas de la República Checa (!) donde sale una edición de Jane Eyre con una Jane - eeeeeh - futurista en la portada. El consejo que te dan las bibliotecas de la República Checa es que lo leas antes que Hollywood (aquí se pueden ver los tres carteles que hicieron), aunque en este caso de Jane Eyre 1944 la lectura de Hollywood fue bastante mejor de lo que esperábamos/recordábamos.

9 comentarios:

  1. ¡Qué cartel tan chocante e inesperado! Pero tiene su gracia.

    Yo sigo pensando que tú deberías escribir un libro sobre las Brontë, porque entre todo lo que sabes de sus vidas, sus obras y de las diferentes adaptaciones al cine... sería completísimo, seguro. Pero ya no lo diré más, no quiero ser pesada. :-)

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  2. No he visto esa adaptación de Jane Eyre, la tengo por casa, pero aun no me había animado a hacerlo y eso que Orson Welles me encanta. Después de leerte no creo que tarde ahora en verla.
    Ah, y las portadas de los libros son muy graciosas, me encanta la de El Viejo y el mar, qué cachondos los checos jaja.

    Por cierto, tengo ganas de que veas la peli de la MTV, sólo para reírme viendo cómo la pones verde. Creo que es de las adaptaciones de Cumbres Borrascosas más horribles junto con la serie italiana.

    Y secundo a Elvira, ¿para cuándo un libro escrito por ti sobre las Brontë?

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  3. Alma rebelde?? Qué horror!!
    Me encanta la pasión con la que describes las cosas!
    Un muaquis

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  4. Es, sin lugar a dudas, mi Jane Eyre preferida!! De hecho, fue mi primer contacto brontiano...recuerdo verla en el sofá de casa, con mi madre, y acabar las dos encantadas de la vida. Yo debía tener unos 12 años, pero ya apuntaba maneras...
    Y en cuanto a Rebeca, es mejor "versión" de Jane Eyre que muchos otros bodrios que hemos visto...enlazando a DuMaurier a Hitchcok, no debeis perderos un viernes con "Atormentada" ( Under Capricorn ). No tiene desperdicio...

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  5. Las portadas geniales! sobretodo la de El viejo y el mar jeje!
    Tengo en casa Rebecca preparada para ver desde hace tiempo. Algún fin de semana lluvioso y aburrido haré doblete.

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  6. Elvira: créeme, mi mente caótica no está hecha para poner en orden el rinconcito (técnicamente más que rinconcito sería pequeña mansión, pero bueno ;)) Brontë mental. Además es que con las Brontë - en inglés, eso sí - ya está casi todo "inventado". Pero se agradecen los ánimos :)

    Eternal: pues anímate a verla. Puede que te pase como a mí hasta esta vez o puede que llegues a apreciarla desde el primer momento, ya me contarás. ¿Tú has visto la de la MTV?

    Mar: gracias. Sí, hija, sí: Alma rebelde nada menos.

    Samedimanche: ¡tienes buen gusto! ;) Y ya la supiste apreciar a los 12 años. Fíjate, yo en cambio hasta los 28 no he sido capaz de verle toda l gracia a esta adaptación. En fin, más vale tarde que nunca y todo eso.

    También nos has resuelto la noche de viernes de hoy; lo teníamos medio planeado pero no seguro, pero ahora sí que sí: esta noche volvemos a Manderley.

    Y Manuel leyó tu comentario y ahora se frota las manos y busca posibles huecos para hacer un ciclo Hitchcock. Estáis compinchados.

    Guacimara: pues sí, ahora con el otoño llega la temporada ideal para este tipo de películas, con mantita (ay, qué ganas de sacarla del armario de una vez) y sofá.

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  7. Últimamente no he podido dejar comentarios, pero además, me he dado cuenta, que algunos no los ha guardad...Seguro que será culpa de mi portatil (el pobre es un viejin de casi diez años), pero bueno,...espero que este lo puedas leer.
    Volveré para intentar dejar los comentarios que no dejé...jeje.
    Y hablando de Jane Eyre...En Turquia vi una versión turca de Jane Eyre...pensé en ti, quizá te gustaría tener uno en varios idiomas...o tal vez te parece una tontería si no lo vas a entener...en fin...Ya me dirás.
    Por cierto, la versión Checa...no me gusta nada!!
    No he visto la versión de Jane Eyre con Joan Fontaine, pero me encantaría. Jaja, tengo una amiga que me recuerda lo de "Juana Eyre" tuvo la desgracia de leerse una malísima adaptación del libro con doce años...¡¡la vida!!
    Por cierto, me encanta eso que dice Elvira...Desde aquí sumo animos para que escribas algo de Brontë. Aunque esté todo inventado...tu toque personal no. Y yo sé de Brontë más por ti que por los libros.
    Un beso grande!!

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  8. Qué pena lo de los comentarios perdidos :( En fin, yo te los agradezco igual.

    Pues yo con Jane Eyre no soy mucho de coleccionar otros idiomas, pero Manuel sí que colecciona ediciones de Cumbres borrascosas en todos los idiomas que puede, por incomprensibles que le resulten. Así que ya ves que no ibas nada desencaminada con la idea.

    Uy, pues tienes que ver esta adaptación clásica por excelencia, María. Si la ves ya contarás qué te parece.

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  9. Hola.- Sospechaba que la morenita, la niña, amiga de Jane, Helen, era Liz Taylor, como acabo de leer en tu blog, pero por mucho que busqué no lo pude confirmar. ¿De verdad es así? Me enamoré de la niña y del personaje... Lo malo es que Liz ha muerto ya, y hace solo unos meses...

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